A partir del próximo año el Metro de Madrid abrirá hasta las 2:30 horas los viernes y los sábados. Esta ampliación supone la primera fase de un proyecto con el que la Comunidad de Madrid pretende modernizar la ciudad con un transporte público de calidad.
La iniciativa se llevará a cabo en tres fases por franjas horarias que se irán implantando de manera progresiva. Esta primera se pondrá en marcha a lo largo de 2020 y extenderá el horario de cierre de 1:30 horas a 2:30 horas. Tendrá un coste de nueve millones de euros y pretende beneficiar a 1,1 millones de personas al año. Además, esta ampliación sentará las bases para saber cómo actuar con el resto de las partes del proyecto.
En segundo lugar, se adelantará el horario de apertura del suburbano desde las 6 hasta las 5 horas, una medida que repercutiría en más de 2 millones de personas. Por último, la tercera fase tiene la intención de prestar servicio las 24 horas del día, beneficiando así a 3,5 millones de ciudadanos. Según ha indicado el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, la puesta en marcha de las tres fases, logrando la apertura total del metro los viernes y sábados, no superará los 40 millones de euros.
Durante el anuncio de la medida, Aguado reivindicó que los nuevos horarios aportarán “más dinamismo” a la región y supondrán una “garantía” al poder regresar a cualquier hora de la noche. Además, también permitirá principalmente a muchos jóvenes "llegar a casa sanos y salvos en un transporte público sin tener que montarse en un coche con alguien que haya podido beber".
La ejecución de esta medida también afectará al personal de seguridad y se suma a la incorporación de 300 nuevos maquinistas con el objetivo de reducir los tiempos de espera en la estación. Este proyecto representa una de las medidas prometidas por Ciudadanos durante la campaña electoral, que fue recogida por el acuerdo de Gobierno con el PP y se acometerá de forma paralela a la negociación colectiva con los trabajadores.
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