Soy lector habitual de vuestro periódico y lo primero que quiero, como residente y nacido en el distrito –en Álvarez de Castro–, lo que considero un “plus”, es agradeceros el esfuerzo y la presentación de la misma.
En vuestro último número aparece el recuerdo entrañable a la primera Línea de Metro de Madrid, pero en el que solo encuentro una falta: la mención al arquitecto Antonio Palacios, que diseñó las estaciones de esa línea, con sus inolvidables edificios de ascensores de Gran Vía y Sol. Creo también que se debería recordar que en nuestro distrito existen más obras de ese arquitecto gallego, para mí genial, y del que honro sentirme colega de profesión, que dejó en Chamberí el Hospital de Jornaleros y bloques de viviendas en la calle de Viriato, en los pares, en el tramo entre Santísima Trinidad y Álvarez de Castro, entre otras cosas trabajando para los Otamendi.
Reitero mi agradecimiento por vuestro esfuerzo y mi humilde ofrecimiento de más información sobre episodios de la calle en la que vivo, que no conviene olvidar para evitar cualquier intento futuro de desastre urbanístico, como fue la intención de “cargarse dos filas de añosas acacias” (con más de 100 años algunas), en los bordes externos de las aceras entre la Glorieta de Álvarez de Castro, para realizar ¡un aparcamiento subterráneo!... felizmente abortado y de cuya historia guardo documentos y la reacción del vecindario, que pensamos hasta atarnos a los árboles destinados al “arboricidio” el día anunciado para el “crimen”.
Con mis más cordiales saludos.
José Pablo Calvo Busello
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