Casa de México se adentra en el universo artístico de Diego Rivera

Exposición con la que celebra su primer año

La Casa de México en España cumple su primer año y lo celebra con la exposición “Diego Rivera, artista universal”, una muestra con una veintena de obras de uno de los referentes fundamentales en la Historia del Arte mexicano, y que representa parte de la segunda colección más importante del autor.

La exposición, que podrá contemplarse hasta el 16 de febrero en la sede de la Casa de México (Alberto Aguilera, 20), traza un recorrido desde la época estudiantil de Rivera en la Academia San Carlos, hasta sus viajes por Europa y de regreso a México, y permite contemplar la evolución del artista así como sus experimentos con distintas técnicas y estilos pictóricos.

En sus viajes por España, París o Brujas, entre 1909 y 1921, Rivera buscó en las corrientes artísticas más importantes de la época y bajo la influencia de los grandes maestros europeos hasta hallar su propia voz. Así, en la exposición pueden verse algunos ejemplos de sus pinturas cubistas o incluso un paisaje de Cataluña con técnica puntillista.

A su regreso se reencuentra con el México prehispánico y el arte popular, lo que determinó finalmente su estilo. También como uno de los principales exponentes del muralismo impulsado por el político José Vasconcelos, que animó a los artistas mexicanos a decorar muros con un arte donde el pueblo pudiera reconocerse a sí mismo como protagonista. Los más de 8.000 metros cuadrados de pintura mural plasmados por Rivera constituyen todo un referente de la identidad nacional mexicana.

El cuadro “Desnudo con girasoles” (1946) sirve de reclamo para la exposición, en una muestra de obra que persigue ya la esencia de lo mexicano, aunque también destacan otras, como el retrato de su madre, realizado cuando aún era estudiante, el retrato simbolista de su primera esposa, Angelina Beloff, o el de tintes expresionista de su segunda mujer, Lupe Marín.

Dentro del mural

La exposición también reúne una serie de fotografías procedentes del Centro de Documentación de Arquitectura Latinoamericana, y una proyección de 1949 con el autor como protagonista, donde se le ve tomando notas para sus dibujos.

Pero quizá lo más curioso de la muestra sea el espacio didáctico montado a partir del mural “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”, planteado como una actividad divertida y educativa para toda la familia. En ella, los visitantes pueden comprender la obra monumental del artista y a la vez mezclarse e interactuar con algunos de los 30 personajes emblemáticos de la historia de México –entre ellos Frida Kahlo o el propio artista– realizados en cartón en tamaño casi natural, y pasar así un rato dentro del mural de Rivera.

Con motivo de su primer aniversario, Casa de México ha organizado un programa de conferencias, talleres de pintura para adultos y niños y visitas guiadas como actividades paralelas para complementar la llegada de la exposición.