Tras 2020 no llegó la calma, sino el temporal

Terminábamos el infausto 2020 con nuestras esperanzas puestas en el inicio de la campaña de vacunación y, sin embargo, no puede decirse que los primeros pasos de este 2021 hayan sido tranquilizadores. Primero fueron los retrasos en las vacunas, que se solaparon además con una inquietante aceleración de los contagios y el temor de una tercera ola; por si faltaban episodios insólitos, llegó el temporal Filomena, dejando una nevada histórica en las calles de la capital y de toda la región, además de memorables estampas que se quedarán ya en la retina de los madrileños por muchos años. Junto a las fotografías entrañables comenzaron a trasladarse otras de los destrozos ocasionados, y tras estas las de las múltiples dificultades de movilidad a las que hemos asistido en los últimos días.

En Chamberí, primer distrito por población mayor, se sigue con cierta ansiedad el avance en la vacunación, máxime cuando sus áreas sanitarias se mantienen desde hace semanas entre las que más incidencia de contagios acumulan. En cuanto a las complicaciones derivadas de la gran nevada, cabe citar el desplome de la cubierta del patio del Colegio de los Maristas de Chamberí, además de las decenas de calles bloqueadas durante días, con su correspondiente peligro.

Más allá de la actualidad de los últimos días, en Chamberí 30 días publicamos este mes de enero unas páginas centrales con los “deberes” que Ayuntamiento y Comunidad de Madrid –fundamentalmente– deberán afrontar en los próximos 12 meses en nuestro distrito. Un listado con nueve tareas, la mayoría de las cuales vienen arrastradas de años anteriores y que, por motivos burocráticos o judiciales, entre otros, se han ido aplazando, como es el caso del futuro parque del Tercer Depósito, el proyecto de urbanización de las Cocheras de Cuatro Caminos, el Beti Jai o la piscina cubierta de Cea Bermúdez. Ninguna de estas actuaciones parece que pueda concluirse en el presente ejercicio, si bien durante se espera una agilización o bien el inicio de sus obras o su tramitación.

Hay otros “deberes”, sin embargo, que permanecen enquistados en el barrio y a la expectativa de que mejoren en 2021. Uno de ellos es el tema de la suciedad en las calles, sobre el que habrá que aguardar la activación el próximo verano de unos nuevos contratos integrales de limpieza, tras el evidente fracaso de los aprobados durante el mandato de Ana Botella. El otro, las molestias vecinales derivadas del ocio hostelero, en particular en el entorno de Ponzano. Un problema que en el último año se ha agravado pese a la debacle debido a la pandemia de muchos negocios de hostelería, y para el que, por el momento, el Ayuntamiento de Madrid sólo ha ofrecido “un esfuerzo” y pedido “generosidad” en ambas partes.

No podemos despedir este editorial sin recordar a la poeta Guadalupe Grande, fallecida con el nuevo año, y que acompañó a este periódico en la entrevista que realizamos a Paca Aguirre en el domicilio de ambas, en García de Paredes. Madre e hija se han ido con apenas 20 meses de diferencia, dejando un Chamberí más prosaico y menos humano.


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