Desde hace unos meses las torres de la Plaza de Colón han iniciado un proceso de reforma que las llevará a un cambio en la imagen exterior del inmueble y a la adecuación de los espacios interiores. La aseguradora Mutua Madrileña, su actual propietario, ha comenzado este plan después de que la Comisión de Protección de Patrimonio Histórico Artístico y Natural (CPPHAN) del Ayuntamiento de Madrid haya aprobado el proyecto de reforma presentado por Mutua.
Al mismo tiempo, la Comisión de patrimonio confirma que ha iniciado el proceso para incluir la estructura interna en el catálogo de edificios protegidos y afirma que el proyecto presentado es compatible con la protección de la estructura interna requerida por la Comunidad de Madrid al Ayuntamiento.
Las Torres Colón suponen una obra esencial del patrimonio arquitectónico. Fueron concebidas en 1969 por el arquitecto Antonio Lamela y representan un hito al ser el primer edificio construido a través de la técnica de la arquitectura suspendida de la época moderna en España, por lo que son consideradas un acervo del paisaje urbano de Madrid. La edificación está construida suspendida, de arriba hacia abajo, en un desafío a la gravedad. Están compuestas por 23 plantas sobre rasante, llamadas colgantes, y seis bajo rasante, de forma que los pisos superiores no se apoyan en los inferiores.
En julio de 2017, el Pleno del Consejo Regional de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid solicitó al Ayuntamiento que incluyese la estructura interna de las Torres Colón en el Catálogo de Edificios Protegidos. La petición fue recogida y la Dirección General de Planeamiento del Consistorio comenzó el expediente de Modificación Puntual para incorporar estas torres al Catálogo con el nivel 3 grado parcial, que representa el nivel inferior.
Las Torres sufrieron su primera gran transformación ya en la década de los 90, añadiéndole el enchufe que la corona y que sustenta la escalera de incendios que une ambas torres desde entonces. Ante esta situación, la Asociación para la Protección de Torres Colón (APPTC), ha manifestado su rechazo al proyecto presentado por la aseguradora. Su directora, Concha Esteban, ha expresado que “la reforma es destructiva porque también se puede destruir pervirtiendo el sistema, ocultando y añadiendo elementos ajenos a éste”.
Frente a esto, Mutua Madrileña afirma que el proyecto de reforma que va a emprender “además de reforzar la estructura interna, respetará y favorecerá la lectura de la estructura suspendida al liberar a las cabezas del enchufe que las esconde actualmente y destacar el protagonismo de los tirantes, manteniendo la misma superficie edificable, tal y como obliga la normativa municipal”.
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