Antología del fotógrafo Ricard Terré, en la Sala Canal

Hasta el 11 de noviembre se podrá disfrutar de una muestra antológica del fotógrafo Ricard Terré, perteneciente al ‘Grupo Afal’, junto a grandes artistas como Xavier Miserachs o Ramón Masats y figura clave en las corrientes fotográficas del siglo XX.

La obra de Terré se divide en dos periodos bien diferenciados: del 1955 al 1969 y del 1982 al 2005. Nació en Sant Boi de Llobregat (1928) y murió en Vigo (2009). En la muestra hay más de 110 fotografías y la gran mayoría pertenece a este segundo periodo, inspirado por las romerías ancestrales, las fiestas paganas y las procesiones de Semana Santa de la región gallega y lusa. Su plástica se basaba en revelar las fotos en blanco y negro, casi siempre eran retratos anónimos, porque disparaba con una 28 mm. La exposición está basada en sus tres temas predilectos: el reino de la infancia (en la primera planta), la muerte (en la segunda), y la cotidianidad o los días (en la tercera).

Expo Ricard Terre Sala Canal

Laura Terré, comisaria e hija del autor, es historiadora y se ha encargado de recopilar y estructurar la obra de su padre: “Dejando mi emoción a un lado, me alegra haber conseguido presentar al público esta antología de Ricard Terré, y más aún en un lugar tan sugerente como éste, lleno de su símbolos favoritos: las cruces y las aspas, que para él significaban los elementos estructuradores del mundo. Esta performance no habría sido posible sin la ayuda de Lluis Pera, Jordi Lafitte y por supuesto de la Comunidad de Madrid”, señaló durante la presentación.

La muerte en vida


Ricard Terré pertenece a la vanguardia gráfica por su impulsividad y su técnica, enmarcada dentro del tenebrismo barroco por su contenido. El ‘Grupo Afal’ supuso un motor de renovación para la fotografía española de la posguerra. Estos artistas se dejaban llevar por su intuición estética. Terré era pintor y caricaturista y nunca se reconoció a sí mismo como fotógrafo profesional. En esta misma sala de exposiciones se hizo hace poco un homenaje a otro de los miembros del grupo, Gabriel Cualladó. Según Luis Pera, “este grupo marcó un antes y un después en la fotografía española, porque consiguieron abrir un espacio de libertad. Ricard consiguió la universalidad a través de lo local”.

A pesar de tener dos periodos tan distantes, existe una coherencia temática. Todas las fotografías son copias de bromuro de plata, a excepción de algunas reproducciones ampliadas ex profeso de la exposición. Laura Terré explica que su padre tenía varias obsesiones: visitar los cementerios, el ritual de la comida, los exvotos, los objetos abandonados por el hombre, entre otras.

“Mi padre sabía qué foto quería hacer antes de hacerla. No colocaba a sus modelos, pero ya tenía pensada la emoción que quería plasmar. Por ejemplo, con una de sus fotos más famosas, 'La niña de comunión', demostró al público prejuicioso que se pueden plasmar los defectos sin compasión y que el resultado puede ser bello y único. Observando las hojas de contacto, pudimos ver que de esta foto sólo había un fotograma. No tuvo que repetirla. Sintió la emoción del momento y la hizo. La foto buena para él siempre era la primera”.

Además de la exposición, la Sala Canal de Isabel II ha programado visitas guiadas y dialogadas con la comisaria y se ha editado un catálogo. Como complemento a esta muestra, se puede visitar la exposición “Una aproximación a Afal” en el Museo Reina Sofía, que hace un recorrido por la obra de 13 miembros del grupo, Ricard Terré entre ellos, y estará disponible hasta el 19 de noviembre en la cuarta planta.

Laura Conde

 

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