Reabrir el Teatro Quique San Francisco costará más de tres millones de euros

La reforma es más compleja de lo que la Junta previó en febrero

Los chamberileros van a tardar más tiempo del esperado para poder regresar al único teatro municipal del distrito. El Teatro Quique San Francisco cerró el pasado enero, coincidiendo con el fin de la concesión del Grupo Luchana, y se anunciaron entonces unas obras menores y una rápida reapertura. “En febrero se dijo que en seis meses tendríamos un teatro más moderno, y casi un año después la obra ni se ha presupuestado”, ha recordado en el último Pleno, Ruth López, portavoz adjunta de Más Madrid, cuyo grupo ha preguntado por las razones por las que aún no se han licitado los trabajos.

El concejal-presidente del distrito, Jaime González Taboada, ha aclarado la situación: “La obra que queríamos hacer se ha descartado, porque el teatro, después de muchos años sin reformas, tiene serios problemas de seguridad y de accesibilidad”.

González Taboada ha relatado que, tras haber hablado con “unas 15 o 20 empresas” teatrales de Madrid, la Junta de Chamberí decidió hacer un contrato menor para estudiar “cuál era realmente la situación” del inmueble. El resultado: “Se necesita una reforma muchísimo más amplia, que superaría los tres millones de euros”.

Tras la mala noticia, en estos momentos se está barajando si el Área de Cultura se encarga de los trabajos o si el proyecto se saca a concurso, dado que “hay muchos teatros interesados, incluso del distrito, en quedarse con el teatro y asumir la gestión” y la Junta “no tiene capacidad para gestionar el espacio por su cuenta”, explica.

“La obra es lo suficientemente importante, no sólo en cuanto al presupuesto, también es compleja técnicamente, y este es el motivo por el que aún no se ha licitado, pero lo decidiremos pronto”, ha expresado el concejal, que ha añadido que las potenciales empresas gestoras siguen haciendo visitas al teatro.

Mientras se decide la fórmula, Taboada ha revelado que también se está estudiando la posibilidad de instaurar en la sala una escuela de creación de teatro joven, “y que los alumnos que participen puedan hacer ellos mismos las obras de los fines de semana”.

Sea como fuere, parece que el telón del Quique San Francisco permanecerá bajado una larga temporada que, por el momento, nadie se atreve a calcular cuánto durará.

Foto: Teatro Quique San Francisco.