“Queremos nuestra Casa; queremos su Cultura”

Más de 150 personas se manifestaron contra su cierre frente a la Junta de Distrito

A las 16:45 horas del miércoles 17 de febrero, 15 minutos antes de que diese comienzo el Pleno mensual en la Junta de Distrito, más de un centenar de personas se fueron congregando en la Plaza de Chamberí, con un objetivo común: elevar su voz para reivindicar que se prorrogue por otros cuatro años la cesión de uso de la Casa de Cultura y Participación Ciudadana de Chamberí, situada en la calle de Bravo Murillo, 39, y que acoge a 24 asociaciones y colectivos del distrito, que acudieron a esta manifestación, convocada porque “hemos pedido la palabra en el Pleno, para rendir cuentas de lo que se ha hecho durante estos cuatro años desde 2017 y para solicitar que se renueve la concesión, pero el concejal nos la ha denegado, al igual que una reunión que le hemos solicitado”, explicó el portavoz, Óscar Álvarez, dirigiéndose a todos los presentes.

El propio concejal-presidente del distrito, Javier Ramírez, atendió a Chamberí 30 días antes de iniciarse el Pleno, afirmando que “no me han pedido ninguna reunión, porque yo me reúno con quien sea necesario, y si no se les cede la palabra en el Pleno es porque la petición no se ha solicitado en el plazo y la forma necesarios. Es un tema jurídico, no político”. Además, dejó claro que “en la Casa de Cultura hay 57 asociados, que únicamente representan al 0,03% de la población de Chamberí, por lo que queremos abrir este espacio a todos los vecinos, no solo a unos pocos”. Finalmente, dejó en el aire las opciones que se barajan en este espacio: “Tenemos proyectos muy adelantados de lo que vamos a hacer y a los vecinos les va a encantar”.

La respuesta del Presidente de la Casa de Cultura no se hizo esperar, asegurando a este periódico que “solicitamos intervenir en el Pleno con suficiente tiempo de antelación y tenemos un documento que lo certifica. Es un tema absolutamente político, porque al concejal no le gusta la participación ciudadana y está bloqueando la iniciativa vecinal”. Respecto al tema de los asociados que hay en la Casa de Cultura quiso aclarar que “formalmente somos 72 socios, tres por cada una de las 24 asociaciones, pero es una pura formalidad, en realidad somos cientos de personas las que participamos en la asociación”. 

Canciones, poemas y batucadas

Y mientras en la Junta Municipal se desarrollaba el Pleno, los manifestantes, más de 150 personas que llenaban la plaza, haciendo difícil respetar la distancia de seguridad, cantaban, recitaban poemas y tocaban tambores, maracas y panderetas a ritmo de batucadas, mientras gritaban proclamas: “No hay cierre de la Casa de Cultura”, “Casa sí en Chamberí, que nos oigan en el Pleno”, “Queremos nuestra Casa; queremos su Cultura”.

Entre aplausos y actuaciones festivas, tomó la palabra Carmen Ochoa, miembro del colectivo Parque Sí en Chamberí, quien agradeció la presencia de todas las asociaciones presentes, subrayando que “hemos creado un espacio común, donde las diferentes propuestas nos enriquecemos mutuamente. Hoy quieren acabar con nosotros, pero resistiremos todos juntos”.

Tetuán, con Chamberí

A la manifestación no faltó la Asociación de Vecinos Cuatro Caminos-Tetuán, que quiso sumarse a esta convocatoria. Su presidente, Antonio Granero, atendió a este medio: “Estamos mostrando nuestra solidaridad con la Casa de Cultura de Chamberí, porque tenemos muy buenas relaciones con distintas asociaciones de este distrito y porque queremos parar otro atropello más; es lo mismo que se está haciendo en Tetuán con la primera planta del Mercado de San Enrique, que se había cedido a 13 asociaciones y después se nos dejó sin el local, ya que lo más sencillo es no concedernos espacios, para acabar con el tejido vecinal”.

Y así concluyó esta manifestación, que mostró la unión vecinal de Chamberí en torno al futuro de la Casa de Cultura, que deberá ser abandonada antes del 24 de marzo, y que va a tener otros usos, a juzgar por las palabras del concejal-presidente del distrito, quien sentenció que “ya hay otros proyectos en marcha”, , si bien el presidente de la Casa de Cultura no lo tiene tan claro: “Es un argumento que el concejal repite con cada uno de los espacios que viene cerrando y que se ha demostrado falaz. La Casa de Cultura es un recurso público muy bien empleado. ¿Dónde está esa necesidad inaplazable que obliga a cerrarla el 24 de marzo? El Ayuntamiento mantuvo vacío el local durante seis años, antes de que se nos cediera. Si de veras existe esa necesidad, que se haga público para justificar la pérdida de este recurso vecinal”.